¿Por qué seguirles el juego?
enviado a correos@seccion37.com.mx
Solo falta que a cada uno de los miembros
de la sección 37 del s.n.t.e., se le tengan consideraciones por no estar
conformes con las personas que están al frente del comité ejecutivo seccional,
esto, porque considero que el día sábado 27 del presente septiembre del 2008, en
las propias instalaciones deportivas de nuestra organización sindical,
secuestradas también por un pequeño numero de maestros inconformes y que además
miembros del s.e.t.e., que do de manifiesto que no tiene razón de ser, la espera
para que el comité ejecutivo seccional tome la firme determinación de ocupar los
espacios que le corresponden como propietario absoluto los mismos, se puede
decir, que no es posible que un grupo de maestros (muy pocos `por cierto) sigan
queriendo atemorizar a los demás, con sus desplantes esquizofrénicos, con sus
poses de dueños absolutos de una verdad que se les ha ido desvaneciendo al paso
de los días, de una verdad que solo existe en sus mentes enfermas por el trauma
de no poder haber llegado nunca al lugar deseado, o de algunos que autonombran
defensores de las causas legales que jamás han sabido practicar con el ejemplo,
como son democracia, justicia, sindicalismo, algunos ni siquiera han sabido ser
maestros, porque siempre han vivido de las luchas sociales según ellos.
Pues bien, consideramos algunos compañeros, y coincidimos, que basta con
haberlos visto el sábado en los campos deportivos ajenos, en primer lugar,
cobrando por un espacio que no les pertenece, en segundo, queriendo aparentar la
fuerza que no se puede tener si la razón no nos asiste y tercero, quien los
tendrá tan subyugados o a quien harán reverencia para exponerse contra la
inmensa mayoría, y lo que es mas ridículo de su parte, no tener vergüenza de
decir que son muchos cuando la realidad nos demuestra que solo son unos cuantos
que quizás por vergüenza no regresan a la organización que les dio vida como lo
que son o por lo menos lo que dicen que son.
Respetuosamente
Profr.Jose Guadalupe Quintero Chaidez