POLICROMO

Por Rogelio Aros Guzmán

Reorientar la educación

Fuente: www.el-mexicano.com.mx 03 agosto 2009

 

Me llamo la atención sobremanera el dato publicado en la primera plana de "EL MEXICANO", en la que se establece que existen seiscientas plazas para maestros y hay una demanda de seis mil, o sea que hay cuando menos ese número de maestros sin empleo.
Además de la gravedad del problema de la demanda de empleo por parte de los mentores, hay que hacer hincapié en el hecho de que porqué demonios se siguen "produciendo" más maestros si las plazas que existen son infinitamente menores a la cantidad de maestros gra-duados.


El discurso demagogo en México de la educación gratuita, ha hecho creer a las personas y a las familias que la educación universitaria o normalista garantiza el éxito en la vida y cada año las universidades y normales producen profesionistas al por mayor en áreas muy competidas en las que abundan profesionistas del mismo ramo, causando con esto la frustración de muchos de ellos por la falta de oportunidades, debido, precisamente al exceso de profesionistas en relación con la oportunidades de trabajo.
Es ilógico que si una comunidad determinada necesita mil profesionistas de tal o cual ramo, de las universidades egresen cinco mil, pues ese exceso, como dijimos, complicará tanto la carrera de los que ya se encuentran desarrollándose, como la de aquellos que pretenden iniciar sus labores en la rama.


Por eso es importante que las universidades y normales se coordinen con el sector público y privado para ver la solución a este problema, y que reorienten el sistema educativo y hagan los esfuerzos necesarios para que no pase lo que está pasando.
En verdad debe ser frustrante para los profesionistas que egresan de determinadas carreras con sus ilusiones puestas en los estudios que realizaron, al darse cuenta, cuando inician sus labores, que el ramo en que pretenden desarrollarse se encuentra saturado y se ven en la ne-cesidad de dedicarse a otra actividad que nada tiene que ver con lo que estudiaron por tres o cuatro años, más los años de preparatoria, secundaria y primaria.


Pero debe ser aún más frustrante para las familias que se esforzaron por tantos años para prodigarle al estudiante todo lo necesario para que concluyera sus estudios profesionales, sufriendo incluso privaciones, y luego resulta que todo el tiempo y dinero invertido se va por la borda, y ven que sus hijos no se dedican a la profesión para la que estudiaron y se graduaron.


Se tienen que desplegar grandes esfuerzos por parte de las autoridades educativas y expertos en la materia a fin de que reoriente el modelo educativo mexicano que en ver-dad no solo se encuentra desgastado, sino evidentemente agotado.
Gran parte del presupuesto de los Estados y la Federación se va al ramo educativo y no se aprecia, salvo honrosas excepciones, que se estén alcanzando los objetivos en materia , educativa, que no son exclusivamente cuantitativos, es decir no basta con producir profesionistas al por mayor cuando no se necesitan tantos, sino que se deben diversificar las ramas.


Es importante también hacer notar que se debe cambiar el slogan demagogo de "la educación gratuita" por que ni es gratuita, pues es pagada con los impuestos de todos los mexicanos, " ni se encuentra vinculada con la realidad en aspecto de necesidad y nivel de producción, a efecto de que se gradúen los profesionistas que se necesiten y no las enormes cantidades que salen de los recintos universitarios y se dan cuenta, como afirmamos, que su campo de acción está enormemente limitado.


Somos de la idea que en lugar de crear tantos espacios universitarios, se deberían diversificar y guardar una proporción, para que no suceda lo que está sucediendo en el sector de los maestros que de acuerdo a lo datos hay un exceso del 90 % en relación con la demanda, pues hay ofertadas seiscientas plazas y ya han aplicado más de cinco mil maestros. Más opciones, proporcionalidad y reorientación del tema educativo, son absolutamente necesarios.

 

Muchas gracias.