Afirma no tener comunicación con Gordillo
Juan Díaz de la Torre niega vínculos con Elba Esther Gordillo
Créditos: http://www.diariobasta.com/especiales/nota.php?id=208&modulo=Especiales_n Jueves, 1 de Agosto del 2013


El 26 de febrero, luego de 23 años de estar al frente del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), la maestra Elba Esther Gordillo Morales fue detenida por agentes de la Procuraduría General de la República por los delitos de delincuencia organizada y desvío de recursos.

Dos días después, Juan Díaz de la Torre fue nombrado presidente del poderoso sindicato.

Desde entonces, dada su cercanía con Elba Esther, el maestro ha sido cuestionado por columnistas políticos, medios de comunicación y profesores disidentes, quienes acusan la existencia de un gatopardismo en el SNTE. Es decir, "que todo cambia para que permanezca igual".

Pero Díaz de la Torre intenta sacudirse esos señalamientos, pinta su raya con Gordillo Morales, afirma que no hay venta de plazas en el sindicato, que no ejerce el nepotismo y niega injerencia de la hija de Elba Esther en los temas sindicales.

De esto y más habla con BASTA! Esta es la entrevista.

"LAS VENTAS DE PLAZAS, UNA MENTIRA"

El maestro originario de Zapopan, Jalisco, de entrada afirma que son infundios los señalamientos de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), en el sentido de que la estructura sindical permanece igual que con Elba Esther Gordillo, lo mismo que las comisiones y la venta de plazas.

Díaz de la Torre asegura que desde 2008, el SNTE tiene el derecho por ley de asignar plazas de nueva creación en un porcentaje del 50 por ciento, y el resto lo pone la Secretaría de Educación Pública (SEP), sacando a concurso los lugares para evitar desviaciones en este sentido.

Se le insiste sobre los señalamientos de venta de plazas en el sindicato, pero el líder corta de tajo: "Son mentiras esas versiones. Si hay alguien que haya vendido una plaza o que alguien haya comprado, se debe denunciar. El sindicato no comparte el hecho de que a alguien se le venda una plaza.

Y no lo están haciendo las secciones, si hay alguien que por su cuenta lo esté haciendo, hay que denunciar".

El líder del sindicato más grande de América Latina se incomoda ante los antecedentes de su cercanía con Elba Esther Gordillo, toda vez que desde su función como secretario general él autorizaba y firmaba cheques por cantidades exorbitantes que la mujer gastaba a manos llenas en establecimientos de ropa exclusiva en México y Estados Unidos, así como en bienes raíces.

Y así contesta: "Tengo muchos años de servicio en el SNTE, desde 1973 he ocupado todos los cargos, desde el más modesto, y siempre donde estuve le serví a quienes han sido mis dirigentes. Serví a los maestros, ese ha sido mi compromiso y lo tengo acreditado".

Añade: "Cuando digo esto es porque tengo autoridad moral.

En todos los cargos de representación sindical he llegado legalmente, y todos los he concluido transparentemente.

Aspiro a que éste que ahora tengo y al que también llegué legalmente, también pueda entregarlo con la misma transparencia y claridad".

"MI HIJO, EL PRIMER DAMNIFICADO"

Hace casi un año, apenas en agosto de 2012, se celebró una ceremonia en la iglesia de San Martín de Porres, en Guadalajara, Jalisco. El joven abogado Juan Óscar Alejandro Díaz Medina, primogénito de Juan Díaz de la Torre, bautizó a su hija, y la madrina fue Mónica Arriola Gordillo, hija de la maestra Elba Esther, quien también acudió al convite.

Este compadrazgo, reafirmó las versiones de la relación estrecha entre la ahora encarcelada lideresa y su relevo sindical, así como el presunto nepotismo que el número dos del SNTE ejercía con su hijo.

Y es que Juan Óscar Díaz fue el primer presidente del instituto político de la maestra "el Partido Nueva Alianza (Panal)" en Jalisco, para luego brincar a una diputación en la LVIII legislatura local y también a una subdelegación de prestaciones del ISSSTE (otrora feudo de Gordillo Morales) en su entidad.

Un análisis periodístico de Leticia Robles, publicado en Excélsior el 4 de marzo de 2013, apunta, citando a la Coordinación de Administración de la Secretaría de Educación del estado de Jalisco, que "Juan Díaz de la Torre, junto con su hermano Gabriel Díaz de la Torre y su hijo, Juan Óscar Alejandro Díaz Medina, forman parte de los poco más de 300 maestros que están comisionados a labores del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación".

Por ello, surge la pregunta, inevitable.

–Se habla de una relación de compadrazgo entre su hijo y Mónica Arriola, e incluso de que usted ejerce el nepotismo al impulsar la carrera sindical y política de su hijo y su hermano.

Juan Díaz abre más sus ojos azules, suspira, piensa brevemente la respuesta y afirma: "Tengo un hijo de 36 años, él es abogado y, para quien esté interesado, desde su época estudiantil ha sido dirigente político y su pasión es la política.

Le voy a decir algo: el primer damnificado cuando yo arribo a este cargo es él. Primero, porque él sabe y así lo decidió hace unos meses, que en el sindicato no tiene ni un despacho, ni antes de que yo llegara a esto tenía un cargo en donde yo lo hubiera promovido".

"Y hoy que estoy aquí, él sabe que no tiene de mi parte ninguna comisión o posibilidad de llegar a un cargo, aunque lo propusieran los compañeros maestros, porque voy a evitar, precisamente, el que mi familia llegue aquí".

Prosigue con la defensa de su hijo: "Él tiene una plaza en Jalisco y la tiene en licencia, sin goce de sueldo, tiene una comisión sindical sin goce de sueldo. No cobra como maestro, a pesar de que podría hacerlo.

No tiene un cargo en el sindicato ni lo tendrá y no tiene cargo en ningún gobierno municipal, estatal o federal".

–¿Y su hermano?

–¿Hermanos?, tengo un hermano que es profesor, pero hace 25 años que se dedicó mejor a los negocios, a la iniciativa privada, dejó el magisterio.

Tengo otro que es abogado, otro que es sociólogo, pero ninguno cobra en el sindicato.

–Sobre la maestra Elba Esther Gordillo, ¿usted firmaba los cheques que autorizaba?

La pregunta le disgusta, eleva un poco el volumen de su voz y dice: "Los cargos que he tenido en el sindicato están señalados en el estatuto, están en la página de internet, son públicos.

Fui secretario general de inspecciones, fui secretario general, o sea, ¿cómo se administran los recursos del sindicato? ahí está en el estatuto.

No es un asunto personal, están definidas en el estatuto cuáles son las funciones de cada quien, y a las secciones hay que rendirles cuentas, como le dije hace rato, entonces no me siento aludido en absoluto.

Yo entiendo que llame la atención para algunos, pero yo creo que la sociedad y los maestros, los maestros de manera especial, no creo que permitieran que yo estuviera aquí o hubieran permitido elegirme si yo no tuviera acreditada mi autoridad moral.

–¿Usted niega cualquier tipo de injerencia de la maestra Elba Esther Gordillo en los temas sindicales actualmente?

–No lo niego, no la hay. Pudiera existir y yo negarlo, pero no la hay. ¿Quién está dirigiendo el sindicato? Nosotros,… nadie más.

–¿Las hijas de la maestra?

– No, no son miembros del sindicato. Ninguna de sus hijas son miembros del sindicato.

No tienen ninguna injerencia.

–¿Se han dado acercamientos de las hijas de la maestra Gordillo con usted?, ¿han intentado tirarle línea política?

–No, no, no son miembros del sindicato. Tenemos claridad con la responsabilidad que tenemos.

El sindicato es lo que debemos cuidar y es a lo que estamos dedicados.

–¿Se deslinda usted del fraude por el que acusan a Elba Esther Gordillo?

–Hay un proceso judicial que está ahí, yo lo que debo decir, es lo que me mandataron cuando me dijeron eso: que fuera un proceso justo, apegado a derecho, y eso es todo. Yo no puedo ni calificar ni descalificar, no es mi papel.

–¿Pero usted se desliga de cualquier posible vinculación que se pudiera dar en el proceso que se le sigue a la maestra?

–Bueno, no es que me desligue o no, lo que hay es un proceso que se le está siguiendo a una persona o a un grupo de personas. Hasta donde entiendo, nadie más del sindicato está siendo procesado por eso. No puedo particularizar ni para mí ni para nadie más.

–¿Ha hablado usted con Elba Esther Gordillo desde que está en la cárcel?

–No, ninguna…

–¿Y si ella lo manda buscar?

– No, no he tenido ninguna comunicación con ella. Yo tengo una responsabilidad histórica, que es la de conducir al sindicato, voy de un lado a otro. Quiero que los maestros decidan sobre su sindicato y el país necesita a un sindicato fuerte, para servirle al sistema educativo, para mantener la coerción social porque, bueno, somos los maestros de México.