Unidad Gremial y Conciencia Social
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Por el Profr. Manuel Ruelas Jiménez
Ex-secretario General de la Sección 37 del SNTE 1974-1977
31 noviembre 2009
El Vehemente llamado a la unidad formulado reiteradamente por el Profr. Dionisio
Hirales Corral, en la develación de la placa que eterniza con su nombre el
Edificio Sindical con un justo homenaje a su trayectoria sindicalista en el seno
de sección 52 y convertida en nuestra gloriosa sección 37 del Sindicato Nacional
de Trabajadores de la Educación, representa la solidez de los principios, la
firmeza de las convicciones y el pensamiento del hombre que reconoce que los
seres humanos somos pasajeros y las instituciones son las que perduran, unamos
la inteligencia y hagamos un llamado a la reflexión de todos los integrantes del
gremio, para reconocer que al margen de pasiones insanas, está el interés
global, donde predomina el buen juicio frente a la mezquindad humana, que sirve
como soporte al absurdo egoísmo que desconoce el beneficio de todos, porque se
apoya en la envidia, que rechaza la valía de los demás y solo envilece a quien
la posee. Conviene evitar legitimar la ambición, que da paso a las acciones
destructivas donde al final, solo se propicia el predominio de la perversidad de
quien se deja arrastrar por estos ejercicios, que aunque transitorios son el más
vivo ejemplo de que la dispersión únicamente favorece a fuerzas contrarias a los
valores gremiales.
El gremio magisterial tiene un compromiso primordial y éste es con el pueblo, si
esto se olvidara o se omitiera, perdería su esencia y por lo tanto el rumbo, por
ello no es dable siquiera dejar de aplicar la mínima energía en la consecución
de este propósito fundamental, que es la función que desarrollamos como
educadores, porque la tarea que tenemos debe ser siempre, elevar el nivel
cultural de la población y propiciar la obtención de su bienestar, que ya es
impostergable.
El alto significado que adquiere la practica de la unidad, se expresa en el
axioma de que la unión es la fuerza, sin perder de vista aquella manifestación
maquiavélica del “divide y vencerás” que solo beneficia a intereses impropios,
mientras que los ejecutores de estas prácticas solo recogen las migajas que les
ofrecen los que los usan como instrumento o tal vez los azuzan como mercenarios.
Repito un pequeño párrafo del brillante mensaje pronunciado por el maestro
Hirales, sindicalista de reiteradas luchas cuando nos invita a …
“ buscar todos la unidad que nos da mas fuerza para luchar; no agrandemos los
problemas, volvamos a ser como antes, la sección mas fuerte del país,
reconocidos por sirios y troyanos. Todo puede tener arreglo si realmente nos lo
proponemos; no hagamos felices alas autoridades. Seamos felices nosotros.”
Este llamado nos invita a que nos ocupemos de lo que es valioso y nos despojemos
de aquello que es destructivo para la sociedad a la que con pasión se debe
servir y que solo se logra manteniéndonos como sólido monolito que ningún
meteoro puede dañar porque tiene como cimiento la fuerza de la UNIDAD y con
ella, la defensa de las más caras conquistas que hemos obtenido.
Nuestro lema vigente debe ser consolidado “POR LA EDUCACIÓN AL SERVICIO DEL
PUEBLO”, somos los verdaderos interlocutores de la población mexicana, Ningún
gobierno es generoso y la prueba es el abandono de las escuelas y de los
trabajadores de la educación, por lo que nosotros, no debemos soslayar nuestra
misión, una educación de calidad es la base del pleno ejercicio de la libertad y
la mejor garantía del éxito en la vida.