Televisa y sus depredadores


Por: José Guadalupe Quintero Chaidez
Jueves 26 de junio de 2014


Televisa, junto con sus detestables y repudiados comunicadores, supuestamente periodistas que no pasan de ser unos lambiscones, pero seguramente, los mejores pagados no solo de todo México, sino de América Latina quienes no cesan en su empeño de seguir queriendo deteriorar día con día la labor para ellos, insignificante del magisterio de México, y que a últimas fechas, lo hacen responsable de todo lo malo que pasa en cualquier parte, en cualquier escuela, para eso, se valen de extranjerismos a los cuales, hasta contratan personajes sacados de quien sabe donde.

 

Pero que para su fin, les resultan muy a la medida cómo su intensa repeticiones de algo que simple y sencillamente ha existido por siempre en las escuelas, pero que no es exclusivo de las mismas, llamado bulling. Tan es así, que ahora, López Dóriga y Loret de Mola, cuan poseedores absolutos de la verdad y la sabiduría, haciendo creer al televidente, que se debe de hacer responsables a los maestros cuando sea agredido un alumno por causa del bulling, y cárcel si el agredido llegase a fallecer, porque el bulling se ejerce delante de los profesores.

 

A esto, yo les invito a comparar algunos eventos de igual tamaño: Debemos suponer que, cuando un servidor público como un policía, fuera asesinado al realizar un operativo, se deberá de responsabilizar a su jefe por estar este a su cargo, y no actuar de buena forma y dejarlo desprotegido. Lo mismo, cuando un trabajador muera por causa de la falta de cuidado o por juego entre los mismos trabajadores, igual responsabilizar al jefe de la cuadrilla.

 

O bien, cuando un periodista de su equipo, sufra de agresiones, o sea muerto a consecuencia de la encomienda que le dieron, pues que se haga responsable a su jefe puesto que el es el responsable de lo que le pase a cualquier miembro de su equipo.

 

Acaso no es lo mismo. Tratando de decir que las leyes están para ejercer acción penal contra los responsables de los delitos, y no, de los que estén a su lado, porque eso, no los responsabiliza de las acciones de los demás.