Revisará Secretaría  función de prefectos
Reconoce la autoridad educativa que luego de lo ocurrido en el ejido Durango, donde murió una alumna, deben retomar una serie de procedimientos

Fuente: lacronica.com 03 julio 2009 Por Magdalena López mmlopez@lacronica.com


Con el caso que se dio en la Secundaria 7 se tendrán que revisar las funciones en general de los prefectos, consideró el delegado del Sistema Educativo Estatal (SEE), José María Bojórquez Salgado.
Como se publicó en este diario que el 25 de junio la alumna de la Secundaria 7, Astrid Carrillo Sánchez, falleció de una embolia cerebral luego de permanecer cinco días en depresión después de que durante dos horas fue encerrada y presionada presuntamente por el prefecto de dicha Secundaria.
“Las cosas como sucedieron nos dejan ver que hay que retomar una serie de procedimientos en obvio de situaciones que lamentablemente existen”, expresó Bojórquez Salgado.
Mencionó que en el interior de las escuelas existe un reglamento donde se menciona a los padres de familia que en razón de alguna situación que se llegara a presentar con sus hijos se les convocaría a la escuela.
El funcionario municipal comentó que el prefecto es un eslabón, por tal motivo, cada que detecta una situación debe de comunicarla al director de la escuela para que sea éste quien cite a los padres de familia y dependiendo de la situación los oriente a qué lugar debe de acudir a recibir atención.
Indicó que aunque no viene un capítulo específico sobre la estigmatización que en ocasiones se hace hacia los alumnos por sus preferencias sexuales si existe uno general donde se abordan todos los temas que se presentan en los adolescentes.
El maestro comentó que ahora con la alianza por la calidad educativa se busca que los maestros que sean contratados cuenten con las competencias para ocupar el cargo, sin embargo, en este caso específico se está hablando de maestros que tiene entre 26 y 28 años de servicio.
La menor fallecida en el ejido Durango, tenía un problema de salud desde su nacimiento que le impedía hacer ejercicios extremos, por lo que sus familiares relacionan el estrés a la que fue sometida por el prefecto de la escuela con su muerte.