Política y políticos
Créditos: http://ed.el-mexicano.com.mx/impreso/Tijuana/030414/04-03-2014_TIJ_06A.pdf 4 marzo 2014

Fragmento...

Como desde hace muchos años, el conflicto entre el SNTE y el SETE sigue dando de que hablar; actualmente el dirigente de la Sección 37 optó por publicar un desplegado para desmentir los argumentos vertidos por el SETE, sindicato estatal independiente que afirma es el que tiene de su lado y reconocidas por autoridades laborales las condiciones generales de trabajo del magisterio estatal, lo cual fue considerado como falso por la dirigencia magisterial.

 

Según el dirigente, cuando hay una disputa entre dos agrupaciones por la titularidad de las mismas condiciones generales de trabajo, la autoridad lo que hace es irse al conteo de trabajadores, uno por uno, y el que tenga la mayoría es el que gana. El SETE, dice, intentó apropiarse de esa titularidad desde el 2009, pero desistió del intento y ha sido vencido en tribunales en sus reclamos de ser el titular. ¿Por qué?, porque el SNTE tiene unos 20 mil afiliados, y el SETE apenas supera los mil, así de simple.

 

El anuncio del mismo SETE de que emplazaría a huelga desde el 12 de marzo, es también complicado. Su presencia en los planteles es una mezcla, es decir, son pocas las escuelas donde son mayoría de la planta laboral y están entreverados con los del SNTE, esto es, si dicen que van a colocar banderas rojinegras e irse a la huelga; ¿qué va a pasar en un plantel cuando dos o tres son del SETE y 20 o 30 son del SNTE? Es comprensible la desesperación de los setistas porque en muchos casos tienen maestros de los suyos dando clases y llevan hasta cuatro años sin cobrar, pero el problema mayor es que no tienen un oficio de asignación por la autoridad educativa y ahí es donde no pueden avanzar en sus reclamos, pero bueno, algún análisis de otro tipo habrán hecho para anunciar el emplazamiento.

 

Sin embargo, no se debe menospreciar la fuerza del Sindicato Estatal de Trabajadores de la Educación, pues cuenta con miles de integrantes y en el pasado, con grandes marchas y manifestaciones demostró que no está pintado en el escenario magisterial.