Miles no volvieron a clases porque no alcanzaron lugar
Fuente: www.el-mexicano.info   26 agosto 2008

TIJUANA. A diferencia de otros niños, Luis Alcides Villanueva de siete años de edad no se levantó temprano para ir a la escuela. No tiene uniforme, ni mochila, pero sí la ilusión de llegar a un salón de clases, sentarse en su mesabanco y recibir sus libros de texto gratuito.
Ante la falta de espacio en la primaria más cercana a su domicilio, corre el riesgo de perder el año, con lo que por segundo año consecutivo se quedaría sin acudir a la escuela.
Su madre, la señora Elvira Ramos, manifestó su preocupación porque acudió a la primaria Centenario de la Revolución ubicada en Urbi Villa del Prado y no le dieron un lugar, a pesar de que ha insistido desde el mes de diciembre y en febrero, precisamente porque Luis no puede quedarse un año más sin estudiar el primer grado de primaria.
“No hallé lugar, ya son dos años que estoy batallando, va a primero y no alcanza lugar, he hecho filas, fui a preguntar desde diciembre y me dicen lo mismo, que no hay espacios y que venga el primer día de clases cuando ya no hay lugares”, comentó.
Durante este año que el niño se quedó sin escuela, dijo que hizo un esfuerzo por ayudarlo a que aprenda a leer, le compró una enciclopedia y lo ha motivado para que avance en su preparación académica, pero ya le urge ir a la escuela.
“Tengo que pelear para que le den un lugar, porque esta es la única escuela que me queda cerca, no tengo dinero para pagar tanto transporte, así no se puede”, decía la señora, mientras que el gobernador José Guadalupe Millán en su discurso aseguraba que ayer todos los niños de Baja California estarían regresando a clases.
La realidad es que como Luis, muchos otros niños se quedaron con la ilusión de ir a su primer día de clases, viendo pasar a otros amigos de su edad con mochilas y uniformes nuevos.
Esto también ocurrió a aspirantes a ingresar a la secundaria número 22, ubicada a unos cuantos metros de la primaria Centenario de la Revolución, pues tampoco pudieron volver a clases porque no tienen un lugar asegurado.
Son alrededor de 150 adolescentes los que están a la expectativa de saber si serán o no admitidos para este ciclo escolar.
“Nuestros hijos están en la casa, sin ir a la escuela, porque no sabemos si les van a dar un lugar, no nos garantizan nada, muchos podrían perder el año porque no tenemos dinero para mandarlos a una secundaria lejos”, indicaron padres de familia.
Algunos de ellos durmieron afuera de la secundaria para tratar de obtener un espacio para sus hijos, y ni así lo consiguieron.
Lo mismo sucede en el preescolar y primaria ubicados en Hacienda Las Delicias, en donde desde el viernes los padres estuvieron presionando por un lugar sin obtener respuesta.
“El problema es que no nos atienden, dicen que va a ser cuando se les dé su gana, lo que no se fijan es que como padres estamos perdiendo por no ir a trabajar”.
La situación no es mejor para los niños de la primaria Nueva Creación de Urbi Villa del Prado primera sección, a cuyos padres no han atendido porque directivos y personal prefieren hacer uso de la prepotencia antes que comprender la desesperación que significa no encontrar lugar. (lgr)