Gregorio Carranza H. y su gran compromiso
El triunfo
Una larga espera de un año nueve meses, para que la Sección 37 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, contara con un Secretario General, concluyó a eso las seis de la mañana del pasado 19 de diciembre de 2007, cuando el Comité Ejecutivo Seccional, reestructurado, encabezado por Gregorio Carranza Hernández, rindió su protesta.
El discurso de Gregorio Carranza Hernández,
como Secretario General de la Sección 37 del SNTE.
A la vez, en ese momento se inició el
gran compromiso de Carranza Hernández: Consolidar una verdadera unidad en la
organización, no sólo de palabra o estipulada en documentos, como se tiene
hasta este momento –que se supone son las bases sentadas– y, demostrar con
trabajo y resultados positivos, el por qué aspiró con tanto empeño a la
Secretaría General.
Como todo ser humano, podrá equivocarse, pero sus aciertos deberán ser mayores, para beneficio de los trabajadores de la educación afiliados a la Sección. En otras palabras su margen de error en sus acciones debe ser mínimo.
Tanto en consolidar la unidad, como en llevar a la práctica un plan de trabajo, tendrá que contar para alcanzar metas, con quienes le siguieron en lo que parecía una aventura descabellada, porque se estimaba difícil que durante todo ese tiempo, mantuviera un liderazgo. Será posible ese respaldo, porque hay claros indicios de que Carranza Hernández y su equipo, trabajaron en la base del magisterio estatal, porque en los resultados obtenidos, no afectó el cambio de Secretarios Generales Delegacionales.
Por otra parte, aquellos que en ese lapso surgieron como aspirantes al mismo cargo –algunos surgidos del mismo equipo de Carranza Hernández–, tendrán que apoyarlo desde sus carteras dentro del Comité Ejecutivo Seccional, demostrando así su madurez en la política sindical, porque mantener abiertas las heridas provocadas por la derrota, de nada servirá, a nadie.
Queda claro que la Sección 37, requiere no sólo de un Secretario General, sino de un líder que guíe a los trabajadores de la educación a nuevas metas, entre ellas el restaurar la imagen de la organización que, ante los mismos maestros y la comunidad, quedó deteriorada por los conflictos internos originados en marzo de 2006 y de sobra conocidos.
Julio Peralta Esteva, Presidente del XII Pleno Extraordinario de la Sección 37 –Programado para celebrarse en Mexicali, Baja California, los días 18 y 19 de diciembre de 2007–, auxiliado por un grupo de integrantes del Comité Ejecutivo Nacional del SNTE, entre los que se encontraban Carlos Rubén López Dado, Benjamín Soto Zúñiga, Joel Aguilar Pérez y el mismo Joel Hernández Peña que concluyera su gestión como Delegado Especial, logró con la aceptación de los delegados, se integrara la planilla de la unidad, para bien de la organización sindical.
No fue fácil, porque aspirantes que
formaban parte del llamado “Grupo de los 18”, entre los que se encontraban
Sergio Esaú Cíntora Castañeda, María Luisa Gutiérrez Santoyo y Marisa del
Rocío Romero Palazuelos, lucharon hasta el último momento por alcanzar la
meta, como también lo hizo hasta el último momento Carranza Hernández; pero no
es un secreto la experiencia de Julio Peralta Esteva y, que busca llegar a
feliz término las comisiones que le son encomendadas.
En Baja California, lo demostró, primero en la Sección 2 del SNTE, la que tuvo a su cargo desde el momento que lo dejara José Peñuelas Hermosillo, para buscar una diputación federal, en las elecciones constitucionales, pero a la vez, contribuyó para que se diera un proceso lo más tranquilo posible que concluyó, en aquella ocasión, con la elección de Irma Martínez Manríquez, en la Secretaría General.
Ahora lo hizo en la Sección 37. Llegó con pocos días de anticipación a la realización del Pleno, sin que trascendiera que sería el Presidente del mismo. Escuchó las inquietudes de quienes aspiraban al cargo, reunió la información necesaria y, consideró que era factible la integración de la planilla de la unidad y la realización de un proceso democrático en la reestructuración del Comité Ejecutivo Seccional.
Un grupo, el de Carranza Hernández, no estuvo de acuerdo en la forma como se procedería en la reestructuración del cuerpo del Comité y fue cuando se dio un movimiento de inconformidad –para algunos precipitado– que se inició en el estacionamiento del Hotel Araiza Inn y concluyó en el Salón de Convenciones, donde se realizaban los trabajos del Pleno. Si bien hubo gritos, rechazos y la firmeza en posiciones durante varios minutos, llegó la calma luego de que el aspirante a la Secretaría General, fue llamado a dialogar con Peralta Esteva.
A su regreso, calmó las inquietudes de su gente, solicitando confianza en que el proceso sería limpio, de acuerdo al ofrecimiento de Peralta Esteva; que en ese momento no había ventaja para ninguno de los aspirantes. Los trabajos para la reestructuración se reanudaron sin incidentes.
En una de las salas presidía los trabajos Carlos Rubén López Dado, de cuando en cuando, los aplausos se escuchaban hasta el espacio en el que Benjamín Soto Zúñiga, también miembro del Comité Nacional, hacía lo mismo. Aquí fuimos testigos de la transparencia, de las estrategias con que los grupos buscaban obtener un puesto, de la desesperación de algunos, pero al final, prevaleció el orden.
Ex secretarios generales de la Sección 37: José Luis Andrade Ibarra, Manuel Ruelas Jiménez, Rubén Gudiño Anaya y José María Félix Soto.
Si para algunos la inconformidad manifestada por el grupo de Carranza Hernández, fue considerada innecesaria, sirvió para demostrar, aún antes de la votación quien tenía la mayoría de los delegados.
Desde ese momento se consideró que, si todo se daba en forma democrática y transparente, el futuro Secretario General de la Sección 37, sería el mencionado aspirante.
Para integrar la planilla “Unidad y Trabajo”, en diferentes momentos Julio Peralta Esteva, en su calidad de Presidente, sostuvo reuniones con los aspirantes y hasta varios de sus seguidores, en algunas de las cuales, los ánimos subieron de tono, pero sin llegar a terreno peligroso que pudiera afectar el desarrollo del Pleno.
Que los rumores estuvieron en su esplendor en todo momento, es verdad. Que María Luisa Gutiérrez Santoyo, salió –después de una reunión con Peralta Esteva– con la cara desencajada, luego con reflejos de enojo, seguida por un Santos García Medina, que hacía esfuerzos por alcanzarla para decirle algo al oído. Que Gregorio Carranza Hernández, salió serio, con el rostro también desencajado, solo, con celular en mano, sin que sonora el timbre o hiciera un intento por marcar un número. Que Marisa del Rocío Romero Palazuelos, estaba muy tranquila, porque sabía que la tenía segura, que ella sería la Secretaria General. Que Sergio Esaú Cíntora Castañeda, también estaba triste y escuchaba sin entender a un Sergio García Flores que quien sabe que tantas cosas le decía. Que Roberto Argüelles Sandoval, no daba su brazo a torcer y siguió haciendo su lucha, pero “mírenlo, parece que no logró nada”.
Los ex Secretarios Generales de la Sección 37 –José Luis Andrade Ibarra, Manuel Ruelas Jiménez, José María Félix Soto, Roberto Pérez de Alva Blanco, Rubén Gudiño Anaya y Gilberto Pérez Durán– que asistieron al a la ceremonia de inauguración del Pleno, tampoco se salvaron de los comentarios: Que estaban ahí porque querían apoyar, algunos de ellos “a su gallo o gallina”; que se fueron al restaurante a conversar, juntos, como pocas veces se les había visto, porque pretendían ponerse de acuerdo; que en la tarde regresaron porque todavía seguían sin determinara quién apoyarían.
El nuevo
Secretario General Gregorio Carranza Hernández.
No se ocurrió pensar en que habían asistido porque se quería demostrar que se desea la unidad en la Sección 37 y, que se tenía un ejemplo en los ex Secretarios Generales; que se pretendía llevar a cabo un Pleno que concluyera a eso de las diez de la noche y, que ellos estarían presentes al momento de que el Comité Ejecutivo Seccional, reestructurado, rindiera su protesta, fuera quien fuera el Secretario General, pero como los trabajos se fueron más allá de lo previsto, se retiraron a temprana hora.
Que poco después de las cinco de la mañana, cuando se dio a conocer la integración de planilla “Unidad y Trabajo”, hubo caras serias, es cierto; que el “hielo se rompió” cuando López Dado tuvo dificultades para leer los nombres de algunos integrantes de la planilla, porque fueron escritos a mano, también es cierto, como cierto es que, poco después de las seis, una vez que el Comité Ejecutivo Seccional, reestructurado, rindiera su protesta, los representantes del Comité Ejecutivo Nacional, Julio Peralta Esteva, Carlos Rubén López Dado, Benjamín Soto Zúñiga, Joel Aguilar Pérez y Joel Hernández Peña, estuvieron en el Salón de Convenciones, por algunos minutos y, abandonaron el mismo, sin prisa, saludando a varios maestros.
Los trabajos del XII Pleno
Extraordinario de la Sección 37 del SNTE, habían concluido con éxito y, se
tenía un nuevo Secretario General: Gregorio Carranza Hernández.
Su misión apenas inicia y, tiene un gran
compromiso…
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Créditos: Kasiyas Periodista, Escritor y Fotografo